Opinión

EL MEXICANO QUE DESAFIÓ EL PODER DESTRUCTIVO DE HITLER

  • Protegió entre 30 y 40 mil judíos, libaneses y españoles de los nazis
  • Su audacia fue reprimida; estuvo recluido en Alemania
  • Recibido como todo un héroe por miles de niños, mujeres y hombres

Por Ricardo FLORES MIRANDA

1

Hace 75 años un mexicano desafiaba al poder destructivo de Adolfo Hitler: el ejército alemán nazi y la policía secreta oficial, la temible Gestapo, al proteger entre 30 y 40 mil judíos, libaneses y españoles otorgándoles el amparo diplomático de México.

El también periodista, político y maestro, Gilberto Bosques Saldivar, a costa de su propia vida salvó a esta cantidad de personas que intentaban evadir los campos de concentración nazi de Auschwitz-Birkenau, Treblinka, Belzec y Dachau, entre los más temibles y sangrientos de 39 que existían bajo el poderío del régimen de Hitler.

En reconocimiento a la valentía, a la labor diplomática y humanística de Don Gilberto Bosques Saldívar, el Presidente de México, Enrique Peña Nieto y el Presidente de Francia, Francois Hollande, cancelaron dos estampillas emitidas en forma conjunta por los servicios postales de ambos países, en una ceremonia emotiva, en pasada gira del mandatario mexicano a Francia.

Durante la Segunda Guerra Mundial, la ciudad de Marsella fue ejemplo de valor, como baluarte de la resistencia. Aquí, un mexicano universal, Gilberto Bosques Saldívar, escribió en esta ciudad y comuna portuaria del sur de Francia uno de los capítulos más memorables y honrosos de la política exterior de México.

Como Cónsul General de México en Francia, Don Gilberto se estableció en Marsella en 1940, hace ya 75 años, después de verse obligado a abandonar París por la ocupación del ejército alemán, y con un profundo sentido solidario, comprendió la gravedad del momento histórico que le estaba tocando vivir, y resuelto, sin titubeos, sin importarle la represión del ejército alemán nazi ni de los esbirros de la Gestapo, puso a la diplomacia mexicana al servicio de las personas que buscaban un refugio seguro.

Su misión fue defender, en primer término, a los connacionales residentes en el país galo, para después apoyar a los libaneses, judíos y españoles con pasaporte mexicano; en residencia consular les dio alimento, cobijo y la esperanza de sobrevivir ante la represión alemana.

Tan grande fue la multitud de personas que buscaban una visa mexicana, que el Cónsul Gilberto Bosques alquiló dos castillos el de Reynarde y el de Montgrand, en Marsella, para convertirlos en refugios amparados bajo la diplomacia mexicana mientras se arreglaba la salida hacia México.

Su audacia fue reprimida por la Gestapo, en febrero de 1943, cuando la policía secreta de Hitler lo aprehende y trasladada a Alemania; gracias a un intercambio de prisioneros, es liberado en febrero de 1944, y llega a México en abril de ese mismo año, donde fue recibido como todo un héroe por miles de niños, mujeres y hombres refugiados de las nacionalidades que brindó ayuda.

Dos estampillas se realizaron para conmemorar a tan ilustre mexicano; la diseñada por Sergio Barranca Rábago, quien utilizó para el Servicio Postal Mexicano “Correos de México” la fotografía e ilustración digital para la elaboración de la obra. Bajo la técnica de offset se imprimió el timbre en tintas cyan, magenta, amarillo, negro y tinta de seguridad.

Por el Servicio Postal Francés, la estampilla fue diseñada por Stéphane Humbert-Basset.

Don Gilberto Bosques Alanís, nació en Chiautla, Puebla., el 20 de julio de 1892 y muere el 4 de julio de 1995, a los 103 años de edad.

Tal vez le interese
José Emilio amaba el tiempo, la memoria, los libros, el mar: Cristina pacheco
Sociedades De Pensamiento… Tiempo de Conversión.
“El Ejército responsable de la desaparición de los 43 normalistas”: Francisco Cruz, autor del libro «La guerra que nos ocultan»