Los camarógrafos fueron al campo de batalla para documentar cada acción
- Toscano, Abitia y los Alba filmaron la realidad y brutalidad de la Revolución
- Se consignan más de 619 filmes sobre el conflicto armado
Por Ricardo FLORESMIRANDA
Los camarógrafos cinematógrafos Salvador Toscano, Jesús H. Abitia y los hermanos Alba: Salvador, Guillermo, Eduardo y Carlos, tomaron sus enormes cámaras, se la echaron a la espalda; el tripie al hombro y a dos manos cargaron con las cajas herméticas donde transportaban cientos de pies de película virgen y se lanzaron a los campos de batalla para documentar fílmicamente cada una de las acciones del conflicto armado de 1910.
Los valientes camarógrafos, al igual que los revolucionarios armados “hasta los dientes” con cartucheras, máuseres y sus carabinas 30-30, sin medir consecuencias y a costa de sus propias vidas, se vieron envueltos en los combates; captaron imágenes reales de los enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas del gobierno; obtuvieron aspectos inéditos de cada batalla, fotografiaron campos sembrados de cadáveres, así como plasmaron en sus películas la crudeza de la conflagración , la miseria de los pueblos, el hambre en los niños, mujeres y ancianos y el dolor de los heridos.