- Oleada de funcionarios federales de alto nivel en el Estado de México
- Extraño que la alta burocracia tenga ojos y oídos sólo para los mexiquenses
- Funcionarios del gobierno presentes a largo y ancho del territorio mexiquense
- La lucha electoral en Edomex será de la más aguerrida de los últimos tiempos
OLEADA ROJA… De unos meses a la fecha y antes de que arranque el proceso electoral en la entidad mexiquense de manera oficial y como debe de ser dentro de los estatutos y normas que marca la Ley en la materia, una oleada de funcionarios federales de alto nivel han visitado frecuentemente un sinnúmero de municipios del Estado de México, con el propósito de llevar a cabo una serie de actividades correspondientes a sus respectivas dependencias. Nunca como hoy en día hemos visto muy activo al secretario de Salud, José Narro, haciéndose acompañar de los titulares del IMSS e ISSSTE emprendiendo campañas de salud en pro de los mexiquenses; también el secretario de Educación, Aurelio Nuño Mayer, se le ve dinámico y trabajador presentando acciones innovadoras en el rubro educativo; no se diga de la presencia del secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, o del secretario de Medio Ambiente y recursos Naturales de México, Rafael Pacchiano Alamán; o también del Director General de la Comisión Nacional del Agua, Roberto Ramírez, por nombrar algunos de los hombres fuertes del gabinete peñista, que tienen como encargo (¿presidencial?) dedicar parte de su tiempo atender las necesidades urgentes de los ciudadanos de los 125 municipios del Estado de México. No resulta extraño que la alta jerarquía burocrática tenga sólo ojos, oídos, voz, corazón y brazos de manera selectiva para atender al pueblo mexiquense, pensamos que también otros conciudadanos con las mismas necesidades requieren con urgencia que estén estos funcionarios en sus regiones, y que por razones no aclaradas no quieren salir del Estado de México. Los mexiquenses no queremos pensar mal del actuar de los hombres del poder, tanto que tenerlos cada semana en Toluca, Atlacomulco, Naucalpan, Tecámac, Chalco, Tlalnepantla, Texcoco, Jilotepec y Ecatepec, nos pone a pensar de manera maliciosa e inocentona, que toda la maquinaria del gobierno está dispuesta a obtener adhesiones y predilecciones del electorado para lograr ganar la candidatura de la jefatura gubernatura. Prácticamente ya estamos a unas semanas para que se inicie la lucha electoral, y la presencia de los funcionarios claves del gobierno están más que presentes a lo largo y ancho del territorio mexiquense, ojala y cuando termine la contienda por el poder estatal, sigan así de activos en cada municipio, como lo han hecho hasta hoy… DE COLORES SE PINTA EL ESTADO. Ya con la designación oficial del abanderado del PRD, Juan Zepeda, la lucha torna a ser sangrienta y combativa. Tanto que Delfina de Morena, Josefina del PAN y Alfredo del Tricolor, van con todo. Cada uno, se define como el posible ganador, ninguno va a ceder terreno y si va a pelear a muerte por conquistar la gubernatura. Según los analistas, esta lucha electoral será de la más aguerrida de los últimos tiempos. Los cuatro contendientes tienen la encomienda de sus respectivos institutos políticos golpear, patear, escupir y hasta mentar madres con tal de ganar terreno en el electorado, bueno hasta sacarse los trapos sucios, si es necesario. Sus generales estrategas (Alejandra Barrales por el PRD; Ricardo Anaya o Felipe Calderón por el PAN; Andrés Manuel López Obrador por Morena; y la maquinaria arrasadora gubernamental de PRI) les portarán lo necesario y hasta lo imposible por conseguir la codiciada cereza del pastel: El Gobierno estatal… ARCOÍRIS MONETARIO. Como un gran río correrán millonadas de dinero por su caudal en tres estados de la República donde habrá elecciones para gobernador: Estado de México, Coahuila y Nayarit, y de ayuntamientos y legislativas en Veracruz. De acuerdo con la consultora Integralia el presupuesto de estas contiendas electorales para renovar las tres gubernaturas referidas, dos congresos locales (55 diputaciones) y 270 ayuntamientos ascenderá a 4 mil 28 millones de pesos. Que claro, este dinero, lo paga el pueblo de México. Un desperdicio tirado a la basura, mientras la hambruna en los pueblos sigue sin tener un centavo. Cosas de la vida democrática ¿Cómo ve?
