Editorial

Editorial.- Los que se van y los que llegan

Estamos a dos meses y días para que se lleve a cabo la sustitución de las administraciones públicas municipales 2013-2015 de los 125 ayuntamientos del Estado de México, y la ciudadanía mexiquense sigue en espera de los “cambios” y “transformaciones”, que prometieron los gobernantes de sus correspondientes municipios al inicio de sus gobiernos.

Se van sin pena ni gloria por la puerta trasera, la mayoría de los ediles, sin dar la cara a sus conciudadanos, tanto que las promesas y los compromisos acordados no se concretaron como deberían de ser en beneficio directo de los propios pobladores, como son mejores servicios públicos municipales, seguridad, educación, abastecimiento de agua potable, escuelas dignas, centros de salud, entre otros rubros.

Tal es la falta de compromiso y responsabilidad de los servidores públicos municipales que algunos alcaldes ya ni siquiera llegaron al final de sus periodos administrativos, buscaron la salida fácil y se proclamaron para ser diputados, unos federales otros locales, a fin de eludir sus compromisos, y en algunos casos obtener el fuero para cubrir sus fechorías, en otros, sencillamente, dejar tirada la casa para que el suplente medio la arregle o de plano la deje tal cual y el relevo la componga.

Para los alcaldes electos que tomarán posesión el 1º de enero de 2016, traen en su portafolios un sinnúmero de compromisos y ofrecimientos a los que a todos dijeron sí les darían respuestas favorables en los 100 primeros de días de trabajo. Los mexiquenses una vez más “confiarán” en la palabra del político y esperan cumplan al pie de la letra sus deberes y obligaciones.

Sin embargo, los escépticos no creemos ni pizca de la verborrea política de los que llegan, pues tal cual los que dejan las alcaldías como los noveles ediles que llegan al poder de los gobiernos municipales cojean de la misma pata. No hay diferencia ni en unos ni en otros. Los años de verlos trabajar y la experiencia en la profesión periodística nos dan la razón.

Esperemos equivocarnos y de los 125 ayuntamientos del periodo administrativo 2016-2018, ojala y sean unos cuantos los se inclinen por el trabajo responsable. Ya lo merecen los mexiquenses.

 

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