El 5º Informe de Gobierno de Eruviel Ávila Villegas llega en un momento difícil para la entidad, por el gran descontento ciudadano por la inseguridad que prevalece, así como por los índices de pobreza.
Todos los días, sin exagerar, aparecen noticias sobre enmaletados en Naucalpan; mujer, presuntamente embarazada, ahorcada en Toluca; asalto en comercio de Tlalnepantla, menor de edad desaparecida en Ecatepec y “n” número de notas en el mismo sentido.
El gobierno ha aplicado el Mando Único, con operativos donde participan las policías federal, estatal y municipal, así como el Ejército y la Marina, sin embargo, pareciera que no dan resultado, ¿qué se necesita, qué cosa no está haciendo esta administración? Porque la inseguridad parece no desaparecer y peor aún, parece no tener límites, porque los niveles de violencia asustan, todo esto reflejo de la descomposición social que hay en la entidad, pero también de la falta de oportunidades laborales y las que hay, pese a lo que digan, con bajos salarios, sin todas las prestaciones y sin oportunidades de crecer, por ello a muchos jóvenes, que tampoco tienen la oportunidad de estudiar, les resulta más fácil engrosar las filas de la delincuencia.
Otro situación muy grave y lamentable en el Estado de México, a pesar de la Alerta de Género, es la violencia en contra de las mujeres, mucho se debe al bajo nivel educativo y la pobreza que hay muchos sectores de la población.
Si bien los diferentes niveles de gobierno brindan talleres, en las escuelas de nivel básico ya se aborda el tema, entre otras acciones, aún no está siendo suficiente, porque, por un lado, la pobreza se hereda y se reproduce, con la violencia sucede lo mismo, es un conducta que se aprende y sin una educación adecuada, también se reproduce.
Los jóvenes buscan salidas fáciles a estos problemas, por un lado, como ya lo mencionamos, está la delincuencia, pero hay un nuevo problema, los embarazados adolescentes, muchos de ellos a causa de la irresponsabilidad y de la ignorancia de los métodos anticonceptivos (otras vez por la baja calidad educativa), pero también por la ocurrencia de buscar su independencia, de huir de los problemas de sus casas, sin pensar en los nuevos problemas que tendrán que enfrentar, incluso, en el caso de las mujeres, sin pensar que llegarán a entornos mucho más violentos, en los que sufrirán de golpes e incluso llegarán a la muerte, sin que haya justicia para ellas.
Sí, es verdad, en el Estado de México hay muchas obras de infraestructura, incluso tendrán un teleférico como medio de transporte, pero todo esto se ve opacado por la violencia, la pobreza y la falta de educación, temas que están encadenados.
Ahora, nos preguntamos cuánto está gastando Eruviel Ávila en su imagen este 5º Informe de Gobierno, tan sólo en los cinco spots que se repiten en las principales cadenas de televisión, no creemos que sea poco. Si el gobernador realmente aspira a ser presidente de la República, debe ser congruente entre lo que dice y lo que hace, y en lugar de derrochar recursos en asuntos vanos, debería pensar en un campaña profunda para evitar más episodios de violencia en el Estado de México.
Tan sólo en el primer semestre del año, de acuerdo a cifras oficiales, se registraron mil 32 homicidios; feminicidios, 146, aunque otros conteos registran 900; mientras que desde 2012 se han cometido 12 mil 950 casos de agresión contra mujeres.
En cuanto a pobreza, cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), señalan que hay en el Estado de México 8 millones 269 mil 852 pobres, 49.6 por ciento, casi la mitad de la población, de los cuales un millón 206 mil 900 están en condiciones de pobreza extrema.
Tan sólo con estas cifras, el gobernador tendría mucho más que informar y no sólo admitir que hay fallas, que hay muchos pendientes y temas en los que trabajar.
